El estudio fue el seguimiento más largo de la vacuna contra la hepatitis B hasta la fecha.
Los hallazgos son relevantes para muchas áreas del mundo que tienen altas tasas de infección por el virus de la hepatitis B (VHB). A nivel mundial, más de 350 millones de personas están infectadas de forma crónica, y cada año se producen cerca de un millón de muertes relacionadas con complicaciones de la infección por el VHB.
Cuando el estudio se inició en 1981, la prevalencia de antígeno de superficie de la hepatitis B (HBsAg) fue de 5% a 6% entre los nativos de Alaska que vivían en el área donde se realizó el estudio, las regiones Yukon Kuskokwim Delta y Norton Sound. Los médicos administraron tres dosis de vacuna contra la hepatitis B derivada del plasma a una cohorte de 1.578 adultos nativos de Alaska y niños de 6 meses o más de 16 aldeas, y evaluaron los niveles de anticuerpos de superficie de la hepatitis B (anti-HBs) durante 35 años.
Los investigadores midieron los niveles de anti-HBs en los 112 participantes que no habían recibido pruebas serológicas de seguimiento o dosis de refuerzo después de la serie primaria. Los participantes que tenían niveles de anticuerpos inferiores a los 10 mUI/ml definidos como protectores recibieron una dosis de refuerzo de la vacuna recombinante contra la hepatitis B y se analizaron los anticuerpos anti-HB 30 días después de la dosis de refuerzo.
La proporción de sujetos con niveles protectores anti-HBs disminuyó durante el período de estudio de 35 años. De los 112 participantes que no habían recibido pruebas serológicas de seguimiento, 53 (47%) tenían anti-HBs de al menos 10 mUI/ml y 59 (53%) tenían niveles más bajos y recibieron una dosis de refuerzo. De los que recibieron la dosis de refuerzo, 43 se sometieron a extracción de sangre post-refuerzo; de ellos, 28 (74%) tuvieron una respuesta positiva. En general, 81 de 96 participantes (84%) –28 de 43 que respondieron a una dosis de refuerzo y 53 que tenían un nivel anti-HBs de al menos 10 mUI/ml a los 35 años– mostraron evidencia de inmunidad protectora.
El continuo descenso de la inmunidad inducida por la vacuna anti-HBs durante el período de seguimiento es de esperar. Aun así, una proporción importante está protegida y, en aquellos que perdieron sus anticuerpos durante un período de 35 años, 74% respondió a un desafío, mostrando la presencia de memoria inmune.
Los esfuerzos de vacunación confieren 100% de protección contra la infección crónica de hepatitis B en un área donde el VHB es endémico. Los investigadores deberían centrar su atención en tratar de comprender por qué algunos pacientes no responden al desafío después de 35 años, y si esto significa que no están protegidos o protegidos de manera diferente.
Fuente: REC