El Dr. Taciano Lemos Pires, director del hospital, explicó que la disposición se adoptó para reducir cualquier complicación que pueda producir este agente microbiano.
Ante esto, los partos de bajo riesgo los atenderá el Centro de Atención Integral en Salud de Desamparados y los de mayor riesgo se refieren a centros hospitalarios de la red institucional.
Además, con el apoyo del Comité de Infecciones Intrahospitalarias y Epidemiología, se adoptaron una serie de medidas para extremar la desinfección.
La Dra. Carmen Zaglul Matta, jefa del servicio de Neonatología, mencionó que este brote coincidió con el fallecimiento de seis niños prematuros que nacieron con menos de 33 semanas de gestación y con pesos que oscilaron entre 700 y 1.800 gramos y quienes estaban con ventilación mecánica, alimentación parenteral y en condiciones de gran vulnerabilidad.
Los especialistas explicaron que analizan si los fallecimientos están asociados a la presencia de esta bacteria.
Hoy epidemiólogos del nivel central de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), dirigidos por la Dra. Xiomara Badilla Vargas e infectólogos del Hospital Calderón Guardia y del Hospital Nacional de Niños analizaron tanto la situación como las medidas de control que ya se pusieron en práctica. Además, en la CCSS aseguraron que dan respaldo al centro médico para investigar el origen del foco infeccioso y su atención. Es la primera vez que se detecta esta bacteria en el hospital.
La Dra. María Eugenia Villalta Bonilla, gerente médica de la CCSS, dijo que desde ese despacho se le dará todo el respaldo al Hospital Calderón Guardia para que investigue el origen de este foco infeccioso y su respectiva atención; adicionalmente, se está coordinando con otros hospitales de la red para que atienden los partos que le corresponden al Hospital Calderón Guardia.
Fuente: REC