El dispositivo consta de una microbalanza de cristal de cuarzo con sensores que generan corriente eléctrica cuando son deformados por una presión mecánica. De ese modo, son capaces de detectar cantidades mínimas de moléculas, como la proteína no estructural 1 (NS1) del virus del dengue. En presencia de la NS1, los nanocristales de celulosa bacteriana que se hallan en la superficie del dispositivo reaccionan químicamente, indicativo de que el virus está en la muestra de sangre analizada.
“El dengue se diagnostica mediante la detección de la NS1, presente en las membranas de las células infectadas por el virus días después de iniciada la enfermedad”, dice Maria Rita Sierakowski, del Departamento de Química de la Universidad Federal de Paraná, Brasil. “Si el biosensor identifica esa proteína, tenemos la confirmación indirecta de que el paciente está infectado”, añade.
Ella y otro bioquímico, Cleverton Luiz Pirich, también de la UFPR, son los autores del estudio publicado en la revista Biosensors and Bioelectronics que describe el dispositivo y sus resultados.
Mediante pruebas realizadas en el Instituto de Química de la Universidad de São Paulo (IQ-USP), Brasil, se evaluó la eficacia del biosensor. Allí está una de las microbalanzas de cristal de cuarzo más precisas del país. El equipo —desarrollado con el apoyo de la FAPESP— confirmó la presencia de la NS1 en todas las muestras de suero contaminadas con el virus a las que fue sometido. No obstante, todavía precisa pasar otras pruebas para garantizar que reproduzca el mismo diagnóstico en varias muestras contaminadas.
Los expertos también pretenden evaluar su eficacia usando nanocristales de celulosa vegetal además de los nanocristales de celulosa bacteriana, para reducir aún más su costo actual de producción, que es de aproximadamente US$ 30. Según Sierakowski, es arriesgado estimar cuando estará disponible el biosensor en la red pública de salud, pues falta concluir las pruebas y comprobar sus ventajas económicas.
Para el físico Nirton Cristi Vieira, del Instituto de Ciencia y Tecnología de la Universidad Federal de São Paulo, Brasil, el biosensor es promisorio y puede contribuir al perfeccionamiento del diagnóstico del dengue. Vieira y el ingeniero de materiales Valtencir Zucolotto, del Instituto de Física de la USP, trabajan actualmente estrategias para perfeccionar un biosensor creado por ellos, que también reconoce la proteína NS1 “para que sea posible diferenciar genéticamente si la infección ha sido causada por el virus del dengue o del zika”.
El estudio publicado en Biosensors and Bioelectronics es resultado de investigaciones financiadas por la FAPESP, uno de los donantes de SciDev.Net.
Fuente: scidev.net