Brasil, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, México, Paraguay y Perú son siete de los 12 países a nivel mundial donde ya se vende la primera vacuna contra el dengue, resultado de 20 años de investigación no exenta de desafíos, principalmente debido a que la enfermedad es causada por cuatro subtipos distintos del virus.
Desarrollada por Sanofi Pasteur, Dengvaxia® es una vacuna subcutánea que se aplica en tres dosis cada seis meses. En Brasil cada dosis vale cerca de 41 dólares; en Paraguay 115 dólares.
Su eficacia es mayor contra los serotipos DENV-3 y DENV-4 que DENV-1 y DENV-2. Además, previene más casos graves que leves, protege a partir de los 9 años y está aprobada hasta los 45 o 60 años dependiendo de la agencia regulatoria. Su eficacia es mayor en personas previamente infectadas por algún serotipo.
“En los estudios clínicos, la eficacia para prevenir casos severos fue superior a 93%; para prevenir hospitalización 80,3% y para prevenir la enfermedad sintomática, 65,6%”, dijo César Mascareñas, director médico de Global Dengue de Sanofi Pasteur.
Basándose en modelos matemáticos, en abril el Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico (SAGE) en Inmunizaciones de la OMS señaló que “en lugares de alta transmisión, su introducción rutinaria en la adolescencia temprana podría reducir las hospitalizaciones por dengue en 10 a 30% en un plazo de 30 años, representando un beneficio sustancial de salud pública”.
Pero, recomiendan considerar su introducción solo en áreas geográficas con seroprevalencia superior a 70% en el grupo objetivo de la vacuna.1
“Es un avance significativo en el control del dengue, considerando que los métodos de control vectorial no han interrumpido la transmisión endémica ni han tenido impacto en reducir la gravedad de los casos”, dijo José Ramos Castañeda, investigador del Instituto Nacional de Salud Pública de México.
Sobre la eficacia diferencial entre personas seronegativas (52%) y seropositivas (81,9%), advierte que en “ambas poblaciones es estadísticamente significativa, por lo que el estado de exposición al virus en una región candidata a vacunación no debería ser limitante para decidir vacunar”.
Víctor Fiestas, médico investigador del Instituto Nacional de Salud del Perú, opina que para incorporarla a nivel nacional o subnacional “se deberá tener en cuenta que su uso no está aprobado para niños y adultos mayores (grupos de riesgo para dengue grave) y las dificultades en el seguimiento de adultos vacunados para completar las tres dosis”.
Agrega que también es relevante la eficacia contra el serotipo principal de la región, especialmente si es DENV-1 o DENV-2, y el presupuesto para su compra, en países donde otras inmunizaciones para enfermedades de gran incidencia aún no están en el esquema nacional.
- Puede consultar el texto completo de las recomendaciones del SAGE en Inmunizaciones de la OMS, en inglés, haciendo clic aquí.
Fuente: REC