El estudio, de casi 632,000 adultos canadienses, halló que los que tenían los niveles más bajos de HDL tenían unas tasas de mortalidad más altas por enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular a lo largo de 5 años. Pero también tenían unas tasas de mortalidad más altas por cáncer y otras causas.
Además, no hubo evidencias de que niveles muy altos de HDL (por encima de 90 mg/dL) fueran deseables. Las personas con un HDL tan alto eran más propensas a fallecer por causas no cardiovasculares, en comparación con las que tenían unos niveles intermedios de HDL, según el estudio.
El hecho de que un nivel bajo de HDL esté vinculado con unas tasas altas de mortalidad por todas las causas es clave, dijo el investigador principal, el Dr. Dennis Ko. Eso sugiere que es solamente un “marcador” de otras cosas, como por ejemplo de un estilo de vida menos saludable o de una salud peor en general, señaló.
Eso también significa que no es probable que un nivel bajo de HDL contribuya directamente a las enfermedades cardiacas, añadió Ko, científico principal del Instituto de Ciencias Clínicas Evaluativas, en Toronto. “Este estudio contradice a la sabiduría convencional”, dijo.
Pero la realidad es que los médicos ya se están apartando de la sabiduría convencional, dijo el Dr. Michael Shapiro, cardiólogo. Shapiro, que no participó en el estudio, es miembro de la Sección de Prevención de las Enfermedades Cardiovasculares del Colegio Americano de Cardiología (American College of Cardiology). “Muchas personas saben que el HDL es el colesterol ‘bueno'”, dijo. “Pero quizá no sepan que la comunidad médica se está apartando de la idea de que tenemos que aumentar los niveles bajos de HDL“.
En parte, esto se debe a los resultados de varios ensayos clínicos que realizaron pruebas con la vitamina niacina y ciertos medicamentos que aumentan los niveles de HDL. Los estudios descubrieron que aunque los tratamientos aumentan el HDL, no provocan ningún cambio en el riesgo de esas personas de sufrir problemas cardiacos.
Además de eso, dijo Shapiro, la investigación ha mostrado que las variantes genéticas asociadas con los niveles de HDL no tienen ninguna conexión con el riesgo de enfermedad cardiovascular. Nadie está diciendo que los médicos y los pacientes deberían ignorar los niveles bajos de HDL. Los niveles por debajo de 40 mg/dL están asociados con un riesgo más alto de enfermedad cardiaca. “Ese hallazgo es consistente“, dijo Shapiro. “Así que podemos usarlo de manera fiable como marcador para identificar a los pacientes con un riesgo alto y ver qué más cosas les pasan”. Las causas de un nivel bajo de HDL incluyen un estilo de vida sedentario, fumar, una mala dieta y tener sobrepeso. Y probablemente son esos factores (y no el nivel de HDL por sí mismo) lo que realmente importe, dijo Shapiro.
Los hallazgos actuales se basan en expedientes médicos y otros datos de casi 631,800 adultos de Ontario de a partir de 40 años de edad. A lo largo de 5 años, casi 18,000 de ellos fallecieron. El equipo de Ko encontró que los hombres y las mujeres con unos niveles bajos de HDL eran más propensos a fallecer durante el periodo de estudio, frente a los que tenían unos niveles de entre 40 y 60 mg/dL. Pero tenían un riesgo más alto no solamente de muerte por enfermedad cardiaca, sino también de muerte por cáncer y otras causas.
Las personas con un nivel bajo de HDL tendían a tener unos ingresos más bajos, y unas tasas más altas de tabaquismo, diabetes e hipertensión. Después de que los investigadores tuvieran en cuenta esos factores, el nivel bajo de HDL seguía estando vinculado con unas tasas más altas de mortalidad.
“Pero no pudimos tener en cuenta todo”, dijo Ko. Y cree que factores distintos de la cifra del HDL, como el ejercicio y otros hábitos del estilo de vida, son los que cuentan. “Cuando se ve algo [un nivel bajo de HDL] que se asocia con la mortalidad por muchas causas distintas, probablemente sea un marcador ‘genérico’ de riesgo, más que una causa”, comentó Ko.
Y en el otro extremo, las personas con un nivel de HDL muy alto (que supere los 90 mg/dL) se enfrentaron a unos riesgos más altos de fallecer por causas no cardiovasculares.
Shapiro calificó al hallazgo de “muy interesante”, pero las razones de ello no están claras.
El alcohol puede aumentar el nivel de HDL. Por lo que eso plantea la cuestión de si beber mucho ayuda a explicar el vínculo, dijo el Dr. Robert Eckel, profesor de medicina en el Campus Médico de Anschutz de la Universidad de Colorado, en Denver.
De cualquier forma, no hay razón por la que las personas deban intentar aumentar mucho su nivel de HDL usando niacina u otros medicamentos. “Aumentar los niveles de HDL con medicamentos no está indicado”, dijo Eckel.
Shapiro enfatizó la importancia del estilo de vida: “No fume, haga ejercicio aeróbico con regularidad y pierda peso si necesita hacerlo”.
Esas cosas podrían, de hecho, aumentar su HDL, indicó Shapiro. Pero lo que importa no son las cifras, dijo, sino el estilo de vida saludable.
Los hallazgos aparecen en la edición del 31 de octubre de la revista Journal of the American College of Cardiology.
Fuente: IntraMed