RUBEOLA IgG ANTICUERPOS
Muestra: suero, muestras pareadas con 15 días de diferencia
y procesadas juntas.
Método: enzimoinmunoensayo (ELISA), quimioluminiscencia.
Valor de referencia:
Enzimoinmunoensayo (ELISA): negativo< 15 UI /ml.
Quimiolumiscencia: negativo< 5 UI/ml
Significado clínico:
La rubeola es una infección viral exantematosa aguda que afecta
a niños y adultos. También puede provocar infección
fetal con defectos observables ya al momento del nacimiento ; y en los
adultos provocar distintas formas de artritis.
La incidencia de los casos clínicos de rubeola es mayor en primavera
y se reconoció tradicionalmente que es más frecuente en
niños de 5-9 años.
La primoinfección generalmente ocurre en la infancia, caracterizada
por ser una enfermedad leve.
En las mujeres adultas se han descripto casos de artralgia con parestesia.
Cuando infecta a la mujer embarazada, la gravedad de las consecuencias
de la infección viral disminuye según ésta se produzca
en el primer, segundo o tercer trimestre del embarazo.
Si la infección se produce en el primer trimestre, el riesgo de
defectos congénitos varia entre 33 y 50 %.
El síndrome de rubeóla congénito se caracteriza
por cualquiera de los siguientes efectos teratogénicos:
- - ceguera.
- - sordera.
- - defectos cardíacos congénitos.
- - retardo mental.
Los efectos no teratogénicos pueden ser: retardo en el crecimiento,
osteítis, púrpura trombocitopénica, hepatoesplenomegalia,
anemia hemolítica o neumonía intersticial.
Hay casos de recién nacidos con infección subclínica
de desarrollo tardío de sordera y otros en los cuales no hay daño.
La vía respiratoria es la más importante, el vírus
se multiplica en la parte superior del sistema respiratorio pasando a
los nódulos linfáticos y posteriormente a la sangre.
El período de incubación es de 16 a 18 días. Los
recién nacidos con síndrome de rubeóla congénita
son agentes de diseminación viral y representan un peligro ya que
eliminan virus por saliva, orina y otras secreciones, siendo muy infecciosos
durante meses luego del nacimiento.
En la infección primaria si bien hay variaciones individuales en
los aspectos cuantitativos de la respuesta inmunológica, la inmunidad
es de por vida y el diagnóstico se realiza con sueros que se procesan
pareados (el primero debe ser tomado lo más rápido posible
ante la aparición de los síntomas y el segundo 15 a 20 días
más tarde). La cuadruplicación del título indica
infección reciente.
Las personas que han recibido vacuna para la rubéola no transmiten
la enfermedad a otros, aunque el virus puede ser aislado de la faringe.
Es posible que la cantidad del virus eliminado sea demasiado pequeña
para ser infecciosa. Después de un ataque de rubeóla se
desarrolla protección contra la enfermedad en la mayoría
de las personas. Se ha demostrado la persistencia de anticuerpos específicos
hasta 14 años después de la inmunización.
A pesar de la presencia de inmunidad específica contra el virus
de la rubéola, parecería que la reinfección puede
ocurrir.
Las reinfecciones se han documentado por la detección de una elevación
importante en el título de anticuerpos contra la rubeóla,
en personas con inmunidad natural después de la reexposición
al virus. La mayoría de las reinfecciones son asintomáticas.
Es probable que el virus se multiplique localmente en el tracto respiratorio
superior, pero la viremia ocurre rara vez porque la respuesta inmune del
huésped erradica el virus antes de que pueda invadir la sangre.
Pueden existir diferencias cualitativas en los anticuerpos entre las personas
que presentan inmunidad por vacuna y aquéllos con inmunidad natural;
la reinfección es 10 veces más probable en los vacunados
que en los que tienen inmunidad natural contra la rubeola.
Las personas inmunes a la rubeóla (por infección o por vacuna)
pueden ser reinfectadas cuando se reexpongan.
Esta reinfección suele ser asintomática y detectable sólo
por medios serológicos.
La erupción de la rubeola aparece a medida que se desarrolla la
inmunidad y el virus desaparece de la sangre.
El diagnóstico se efectúa principalmente por serología.
Utilidad clínica:
- Diagnóstico de infección por rubeola.
Una cuadruplicación del título en muestras pareadas es
indicativa de infección aguda.
- Screening de inmunidad contra este virus en embarazadas o previo al
embarazo o a la vacunación
La presencia de IgG demuestra inmunidad contra la rubeola.
- Diagnóstico de infección congénita: los lactantes
con rubeóla congénita se debe observar un descenso en
el título. Si esto ocurre significa que son IgG maternas que
se adquirieron en forma pasiva. Si se produce un aumento de título
sugiere infección.
- Diagnóstico de rubeola durante el embarazo
La IgG materna que atraviesa la placenta disminuye luego del nacimiento
en aproximadamente 6 meses; no obstante esta síntesis de anticuerpos,
el virus no es eliminado y su excreción continúa por uno
o mas años.
Bibliografía:
1. LotharT. Clinical Laboratory Diagnostics: Use and assessment of clinical
laboratory results, English edition, 1998.
2. Tietz N. W. Clinical Guide to Laboratory test, edited by W.B. Saunders
Company, third edition, United States of America ,1995.
3. Mandel, Bennett and Dolin. Enfermedades infecciosas principios y prácticas.
Editorial Panamericana, 4ª edición; Madrid, España.
Año 1997
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